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Cualquier cosa innecesaria puede ser repentinamente muy necesaria, incluso necesaria para crear algo inusual. Como estas ruedas de bicicleta aquí, que están en la foto . Tal vez fueron entregados al punto de recolección de chatarra, y algunos se mantuvieron en el garaje por un tiempo.
Y luego el propietario decidió decorar su casa de verano con el calado, a diferencia de la esquina de la ciudad. Las dimensiones se ajustan en función del número de ruedas. Si no hay tantos de ellos, puede utilizar el mirador como una casa de juegos para niños.
En principio, no es necesario hacer esta belleza con ruedas. Plantadas junto a las plantas trepadoras todavía esconden todo, tarde o temprano. Pero a los niños les gustará este cenador original. Ruedas que viajan, tierras lejanas, aventuras …